Estas venas (que pueden hacer ver a tu estómago y tu ombligo como mapa de carretera) no solamente son normales sino que son un signo de que tu cuerpo está haciendo lo que tiene que hacer. Forman parte de la red de venas que se esparcen para llevar la mayor cantidad de sangre que es producida durante el embarazo. Estas venas no sólo no constituyen un motivo de preocupación, sino que son un signo de que el cuerpo está haciendo lo que debe. Aparecen más pronto en las mujeres muy delgadas. En otras mujeres, la red venosa puede ser menos visible, no perceptible en absoluto o no resultar visible hasta una fase más adelantada del embarazo.